KIMERA

Comienza a fraguarse en 2015, elaborado entre dos amigos locos por el vino, Luis Moya y un servidor (Gonzalo Celayeta). Pretendíamos meter en una botella de vino nuestra bandera (variedad Garnacha), y reflejar los matices del origen del viñedo, como no podía ser de otro modo San Martín de Unx, cuna de Garnachas y desde mi humilde punto de vista uno de los terruños a tener en cuenta a nivel nacional para esta variedad. Pero queríamos ir más allá y dar un aspecto ancestral al vino, una crianza sobre lías en ánforas de barro, además buscábamos ánforas a la antigua usanza, de gran volumen, viejas y envinadas, donde el barro estuviera “pulido” y donde las paredes gruesas permitieran una crianza larga y delicada. Se antojaba una Kimera, y como tal, nos costó encontrarlas pero el resultado y la espera han merecido la pena.